Croacia, 2- Francia, 2 (Euro 2004-Primera fase)

339. Dado Prso (2-1)

Hay jugadores a los que un partido cambia la carrera. No se puede decir que Miladin Dado Prso fuera un desconocido total hasta ese 5 de noviembre de 2003, el día en que cumplía 29 años, pero tampoco era un primer espada. Establecido en Francia, país que le concedió la nacionalidad, tras el paso por dos equipos de categorías inferiores, una vez había salido de su Croacia natal, había fichado por el Mónaco en 1996 y había actuado dos años cedido en el Ajaccio. El día de su cumpleaños, y aunque no fuera la habitual primera elección del entrenador, Didier Deschamps, era titular en un duelo de la Liga de Campeones contra el Deportivo de la Coruña que su equipo ganó por 8-3 . Él fue protagonista, con cuatro goles en 23 minutos.

Delantero muy potente, de un extraordinario juego aéreo, más hábil de lo que aparentaba y con remate con ambas piernas, pasó a ser una conocido por todos de un día para otro, aunque el rol de titular en el equipo era para Fernando Morientes, cedido por el Real Madrid y decisivo en el papel del Mónaco en la Champions. El equipo del principado sería finalista tras perder contra el Oporto.

El partido y la temporada catapultaron a Prso a la convocatoria de la selección para la Eurocopa de 2004 de Portugal. Hasta entonces sólo había sido once veces internacional y debutó en un gran torneo con un empate a cero contra Suiza. El seleccionador, Otto Baric, confiaba en él y volvió a arrancar de salida en el segundo duelo, en Leiria, ante la vigente campeona, Francia.

El gol

Los franceses se habían adelantado con un autogol de Tudor, pero en un fulgurante inicio de la segunda parte, Croacia había empatado con un penalti transformado por Rapaic. Cuatro minutos más tarde, llegó el gran momento de Dado Prso en el torneo. El jugador del Mónaco recogió un balón largo en el área. Intentó un sombrero sobre Silvestre pero parecía que Desailly frustraría sus posibilidades y rechazaría. Increíblemente, el habitualmente infalible defensa galo disparó al aire y dejó el balón muerto y botando, Prso no lo desperdició y soltó un fuerte disparo con la pierna izquierda que superó por arriba a Barthez.

Croacia no pudo terminar de atar el partido, empatado por Trézéguet. Una derrota en el tercer duelo, contra Inglaterra, por 2-4 dejó a los balcánicos fuera del torneo.

Aquel verano, Prso dejó el Mónaco y logró un lucrativo contrato con el Glasgow Rangers. En Escocia pudo explotar su juego de fuerza y ​​remate de cabeza, ataviado siempre con su característica cola. Estuvo tres temporadas y le sirvió para disputar el siguiente mundial, el del 2006 en Alemania. Se retiró al inicio del 2007, a media temporada y con sólo 32 años, por culpa de problemas físicos irrecuperables en una rodilla. Sólo hacía tres años y pocos meses de la noche que le catapultó al estrellato.